Mindful Eating: 5 consejos para aplicarlo
Mindful es un término que significa "atención plena" y su aplicación en el campo de la psicología ha demostrado numerosos beneficios. Es una forma de meditación que ayuda a mejorar los estados de ansiedad y estrés. También ayuda a las personas a ser más conscientes de sus experiencias y a aceptarlas sin juzgarlas.
El concepto de "mindful eating" se refiere a la aplicación de la atención plena al notar lo que comemos y se ha extendido a los cambios en la conducta alimentaria. Aprendemos a utilizar nuestros sentidos al comer y a reconocer el hambre fisiológica mediante señales de saciedad, avanzando hacia un enfoque más intuitivo y menos intrusivo.
Hambre emocional ¿Para quién es útil?
Un gran beneficio de este ejercicio es que te hace más consciente de la sensación de hambre de tu cuerpo, ayudándote a valorar cuándo empezar a comer y cuándo parar. Esto puede ser muy útil para reconocer el hambre emocional, cuando el acto de comer se produce en un estado de estrés o ansiedad y la ingesta es emocional y compulsiva. En estos casos, esta práctica puede ser utilizada por personas que desean mejorar sus hábitos alimentarios y construir una mejor relación con la comida, independientemente de su peso.
¿Cómo puede practicarse la alimentación consciente?
He aquí algunos consejos para ponerlo en práctica.
- El acto de comer requiere un entorno tranquilo y sin distracciones. Por lo tanto, es aconsejable no comer mientras se ve la televisión o se realizan otras actividades frente a una pantalla.
- Las comidas deben hacerse sentados y durante al menos 20 minutos.
- Cada bocado debe ser un "bocado consciente", masticado lentamente. Presta atención a su sabor, aroma y sensaciones.
- Deje los cubiertos en el plato o colóquelos en él después de cada bocado. Así podrás centrar tu atención sólo en la comida. Esto también ralentiza el ritmo de la comida y deja tiempo suficiente para que la señal de saciedad llegue al cerebro.
- Por último, la respiración profunda y consciente mientras comes también puede ayudarte a vivir este momento de forma tranquila, relajada y agradable.
La alimentación consciente, también llamada Mindful Eating, es una práctica cada vez más arraigada en la sociedad que consiste en aplicar la atención plena a los hábitos alimentarios. Es una nueva forma de entender la comida que redescubre el placer de comer, al tiempo que cambia nuestra relación fundamental con los alimentos y crea una relación más sana con ellos.
Quizás te interesa:Puesto que la alimentación consciente surge directamente de la atención plena, expliquemos primero brevemente en qué se basa este método. La atención plena se caracteriza por desarrollar y mejorar la capacidad de centrarse en el momento presente y ayuda a ser plenamente consciente de él. El mindfulness pretende mejorar la salud y la calidad de vida en general reduciendo significativamente los niveles de estrés y ansiedad cotidianos. También le hace más introspectivo y menos impulsivo en sus decisiones.
¿Qué significa mindful eating?
Comer por miedo, estrés o simplemente por aburrimiento es la satisfacción de una llamada hambre emocional. Esto se debe a que, como han demostrado varios estudios, el cerebro activa los mismos mecanismos tanto durante el hambre como durante la ansiedad.
La diferencia entre estos dos casos es que cuando estás nervioso no comes porque realmente tengas apetito, sino porque estás ansioso, estresado o aburrido. En otras palabras, comer no es un antojo físico, sino emocional, porque está influido por tus nervios y malos hábitos de los que no eres consciente.
La alimentación consciente le ayuda a sintonizar con sus instintos y a gestionar las emociones, sensaciones y pensamientos que le tientan a comer impulsivamente. Como comes con la mente y no con el estómago, también te ayuda a saber si has comido suficiente y cuánto debes comer en distintas ocasiones.
Es importante destacar que la alimentación consciente no es una nueva forma de comer con restricciones y limitaciones. Es una forma de fomentar el bienestar y enseñar a la gente a relajarse y disfrutar de una alimentación sana para evitar la culpa y la ansiedad. Esto es especialmente cierto en la sociedad actual, donde todo se mueve a gran velocidad y apenas hay tiempo para detenerse.
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Cuando sientes apetito o hambre, puedes pensar que es una sensación real, pero en realidad hay otra emoción detrás de esa sensación. Esto no significa que lo que está experimentando no sea real en sentido literal, sino que puede ser una manifestación de sus sentimientos. Por ejemplo, si te sientes ansioso y quieres comer demasiado, en realidad estás deseando compañía, afecto, seguridad y confianza.
- El hambre real se caracteriza por lo siguiente: Se produce gradualmente, no necesitas alimentos específicos, no necesitas saciarlo inmediatamente, dejas de comer cuando te sientes lleno y te sientes mejor cuando has terminado de comer.
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